miércoles, julio 29, 2009



Cuando Clara conociò a Ale, fue todo distinto. No querìa saber ni su cumpleaños, ni su signo, ni de sus ex's. Sòlo lo querìa a èl; con sus palabras y silencios.

martes, julio 28, 2009


Cuando cortes tu pelo, no olvides tejerme una manta con él.
Cuando duerma, mantén los ojos abiertos por mí.
Durante la noche, déjame la luz del pasillo encendida.
Cuando calles, concédeme recuerdos de tu voz.
Si vuelves a amar, recuérdame al menos una vez al día.
Cuando sonrías, permite que sienta tu felicidad.
Por las mañanas, déjame imaginar tu perfume.
Cuando se rompa tu corazón y llores por él, recurre a mí.
Antes de cerrar la puerta por siempre, no te olvides despedirte.
Cuando te vayas, por favor, acuérdate de esto que te digo.
Y no dejes que estemos tristes.

jueves, julio 23, 2009

No creas en caballeros nena

No imagino nada más discreto
que un hombre robándole un beso a una dama
de esos que terminan entre un trago y otro
cuando el karaoke termina, y en el bar,
quedan solo dos
Y entre charla y charla,
pica un poco el corazón
y otro tanto la razón
y el caballero seguía:
"Soñé que tu voz me despertaba,
bajo una noche de soles celosos,
celosos de vos"
Y aquél día, entregué,
algo más que mi copa vacía.

Podría guardar el recuerdo
de aquel mal trago
podría soñar que no fue bueno
y así no extrañarte cuando te vayas
o simplemente puedo, retomar sueños viejos
y ver si la vida tiene que llevarme,
definitivamente a vos.
Y entre charla y charla,
pica un poco el corazón
y otro tanto la razón
y el caballero seguía:
"Soñé que tu voz me despertaba,
bajo una noche de soles celosos,
celosos de vos"
Y aquél día, entregué,
algo más que mi copa vacía.

Y yo que no ambicionaba nada más que a Mr. Ale,
entregué esa noche,
Yo que nunca dejo las armas muy lejos,
Aquél día entregué,
algo más que mi copa vacía.
Vos sabes bien, yo te doné un corazón.

Con tanta fama de delincuente, ¿tanto te cuesta robarme un beso?

miércoles, julio 22, 2009

Sos el primer bicho de ciudad,
que se mete entre mis miles de desiertos.

jueves, julio 16, 2009

Silence please.

Allí se encontraba, entre el viento y las nubes, cuando apareció responsablemente el jefe menor, Cumplidor, y le dijo:
-Siéntate Silencio, hemos de hablar tu y yo, de como te rebelas a lo que eres y para lo que fuiste creado por ÈL. ¿Cómo te atreves a romper las reglas de tal manera?, ¿acaso es que no valoras el Don que has recibido? ¡Desagradecido has salido! Ahora pues, vete y has lo que sabes hacer, bien sabes que para otra cosa no sirves pero para lo que si sirves, eres el mejor.
Así en silencio se fue, bailando y cantando tristemente, con lágrimas silenciosas esperando que alguien pidiera por él.
Continuo la tarde hasta caer en noche azul, pero nadie pidió Silencio siquiera una vez. Agotado, se fue este a meditar junto al Río, sentado sobre las rocas cubiertas de musgo.
-¿Qué es lo que tanto te hace sufrir?, ¿acierto si apuesto a que es por una mujer por la que tanto has de mojar mis aguas con llanto?
Y en Silencio, negando con la cabeza suspiró, una y otra vez.
-¿Es entonces que te encuentras agotado de tanto trabajo?- prosiguió el Río.
Volvió el Silencio a negar con la cabeza y, esta vez, sus suspiros fueron más tristes que antes. Dudoso, el Río continuó:
-Pues si no es el corazón ni es el cansancio, rompe las reglas y dime Silencio, aquí y ahora, ¿por qué es que lloras sobre mí?


...ends the first part

P. 9

Sin vos no hay velada, aún si las velas están encendidas.


Pero me prometí a mi misma, mirar hacia lo lejos cuando estés cerca de mí.

P. 8

No sirve construirme un futuro si el presente todavía no abandona mi pasado.

martes, julio 07, 2009

P. 7

- Te ofresco una mentira - le dije mientras sentada en el piso jugaba a ser otra.
- ¿Y esa mentira que me ofrece? - respondiò.
- Para mentir, tenès que saber la verdad. Bueno, yo te ofresco la mentira.
- ¿Y por què no la verdad?
- ¿No te gustan las mentiras? - dije fingiendo estar sorprendida.
- No. Son inùtiles y no quiero que nunca nos digamos mentiras.
Apaguè la grabadora y guardè una copia en cada habitaciòn paratenerla preparada siempre. Ahora cuando diga que llegò tarde por trabajo y yo no sepa que decir, tendrè preparada mi arma secreta. Ah, tambièn la grabaciòn.

47 razones para quererte...y contando...


1. Te quiero cuando me querès
2. Te quiero a la mañana
3. Te quiero a la tarde
4. Te quiero a la noche; pero màs a la mañana.
5. Te quiero cuando estàs
6. Te quiero cuando no estàs; pero màs cuando si estàs.
7. Te quiero con barba aunque me pinche.
8. Te quiero màs sin barba.
9. Te quiero porque existis.
10. Te quiero porque de no existir querrìa querer como te quiero ahora.
11. Te quiero porque me criticas.
12. Te quiero porque me queres.
13. Te quiero amargo.
14. Te quiero dulce. Màs dulce que amargo.
15. Te quiero rubio.
16. Te querrìa igual si fueras morocho.
17. Te quiero con voz ronca.
18. Te quiero por ser dìas perfectos.
19. Te quiero por esconderme de los malos dìas.
20. Te quiero en los malos dìas. Màs en los buenos que en los malos.
21. Te quiero tìmido.
22. Te quiero borracho.
23. Te quiero falopero.
24. Te quiero por hacerme màs grande.
25. Te quiero como una nena.
26. Te quiero como una mujer.
27. Te quiero a oscuras.
28. Te quiero abajo del sol.
29. Te quiero cuando estàs lejos.
30. Te quiero cuando estàs cerca.
31. Te quiero màs cerca.
32. Te quiere mi sistema limbico.
33. Te quiere mi corazòn.
34. Te quiero mi perro.
35. Te quiero dormido y despierto.
36. Te quiero soñando.
37. Te quiero cuando jugàs conmigo.
38. Te quiero cuando volvès.
39. Te quiero cuando me odias.
40. Te quiero cuando te odio.
41. Te quiero fotografìado.
42. Te quiero en carne y hueso.
43. Te quiero con frìo y con calor.
44. Te quiero màs càlido que frìo.
45. Te quiero hoy.
46. Te quiero querer mañana.
47. Te quiero porque te quiero
.

jueves, julio 02, 2009

P. 4

Nuestro amor se ha devaluado, lo que te doy en eternidades, me lo devuelves en pequeños momentos.

¿?

Clara no podía recordar la última vez que había recibido una carta, que no fueran cuentas a pagar o publicidad engañosa.
El remitente le pareció absurdo e incluso la hizo reír. Con una sonrisa enorme en su cara maquillada de muñeca abrió el sobre:
“Ana y Mauricio quieren que seas
parte del día más importante
de sus vidas; la vida que comenzaran
juntos, con amor y prosperidad”

Su sonrisa grande pero silenciosa se torno en una carcajada imparable. Su hermanase casaba. La misma hermana que la había echo jurar que jamás se casaría, ni dejaría todo por ser una señora de su casa. Recordaba lo que le decía de chica: “Ningún hombre del mundo, Clara, vale todos tus sueños”.
Y a pesar de estar feliz por su hermana, porque ella misma parecía estar feliz, no pude evitar sentirse engañada. Su maestra rompía las reglas que le había enseñado.
Luego volvió a mirar el sobre y a leer la carta y descubrió lo tonta que era. ¿Qué hubiera pasado si esa carta hubiera sido de Ale? Sabía que no iba a sentirse feliz, pero...
La vida que comenzaran...juntos...
Cuando Ale empezara de nuevo, ¿seguiría esperando como ahora? ¿Podría ser parte de su día más importante sin ser la protagonista?
Clara volvía a lo de siempre, aun si el disparador había sido una noticia alegre y sin Ale, él siempre era capaz de aparecer.

¿Sería un nuevo comienzo para Ale el único fin a su constante espera?

Ni la desesperanza más grande que
puedas mostrarme,
acabarán con mi fiel deseo de esperarte.